¿Sabías que las caries no solo afectan a la salud bucal de tu pequeño, sino también a su desarrollo y crecimiento?
Más allá de las molestias e incomodidades, las caries pueden tener repercusiones significativas en la vida de un niño. En este artículo, exploraremos cómo esta enfermedad silenciosa impacta en el desarrollo físico, social y emocional de nuestros pequeños.
La clave para evitar estas caries radica en manos de los adultos y se llama cuidado y prevención, por eso ¡Únete a la lucha contra las caries infantiles y descubre cómo proteger la salud y el bienestar de tu hijo!
Caries en la etapa infantil
Las caries son una enfermedad que afecta a los dientes de niños y adultos, pero en la etapa de crecimiento infantil tienen un impacto especial. Las caries son una afección crónica y no transmisible que ataca a los tejidos duros del diente. Se caracterizan por la destrucción del esmalte dental, la capa más externa del diente, debido a la acción de los ácidos producidos por las bacterias de la placa dental. Normalmente debido a una mala higiene bucal y a una ingesta excesiva de azúcares.
¿Por qué son más comunes las caries en la etapa de desarrollo infantil?
Los dientes de leche son más vulnerables a las caries ya que el esmalte que los recubre es más delgado, lo que hace más fácil que las caries penetren en ellos. Los niños aún están aprendiendo a mantener una buena higiene bucal, lo que significa que muchas veces el cepillado no se realiza correctamente. Además, su dieta suele ser rica en azúcares, lo que aumenta el riesgo de caries.
Cómo afecta las caries al desarrollo infantil
Las caries no solo provocan dolor o la caída precoz de las piezas dentales, sino que interfieren considerablemente en el desarrollo de los niños y niñas. Las caries infantiles suponen un gran problema a nivel mundial según la OMS entorno al 90% de los niños de menos de 12 años sufren de esta patología, siendo la enfermedad crónica más común en la infancia. Pero, ¿cómo afecta a su desarrollo?
Alimentación
Las caries provocan molestias y dolor bucal, lo que supone una dificultad para los pequeños a la hora de ingerir alimentos, ocasionando una ausencia de nutrientes en su organismo esenciales para su correcto desarrollo y crecimiento. Muchas veces pensamos que los niños no quieren comer algunos alimentos porque no les gusta, pero en realidad puede deberse a que les duele al consumirlos.
Desarrollo maxilar
La aparición de las caries, con el tiempo, provoca una pérdida prematura de los dientes. La ausencia de las piezas dentales ocasiona problemas en la formación del hueso maxilar y de espacio para la formación de los dientes definitivos, causando apiñamientos y descolocaciones. El maxilar es el hueso que sostiene los dientes y juega un papel crucial en la masticación, el habla y la respiración.
Concentración
Las caries causan un dolor intenso en los dientes, lo que provoca una distracción constante en los niños dificultando la concentración en cualquier tarea. Esto provoca frustración e irritación en ellos, lo que afecta a su desempeño escolar. La falta de concentración y motivación en los niños puede derivar en situaciones de falta de autoestima, ya que no se ven capaces de realizar las mismas tareas que el resto de sus compañeros.
Descanso
El dolor de muelas puede ser una molestia constante que dificulta conciliar el sueño y mantenerlo durante la noche, esto es un grave problema, ya que los niños necesitan descansar plenamente al menos 8 horas. Además, el dolor de muelas puede desencadenar bruxismo, que es el rechinar o apretar los dientes durante el sueño. Esto causa dolor de mandíbula, dolores de cabeza y trastornos del sueño.
Conclusiones
La detección temprana de las caries es fundamental para prevenir complicaciones mayores. Es responsabilidad de los adultos crear un entorno que favorezca la salud bucal de los niños, enseñándoles buenos hábitos de cuidado bucal desde pequeños, para que lo conviertan en una rutina agradable diaria. Recuerda. Las caries son una enfermedad prevenible y cuya detección temprana es clave. Algunos consejos que te damos son:
- Enséñales a cepillarse los dientes dos veces al día con una pasta dental con flúor.
- Supervisa el cepillado hasta que sean lo suficientemente mayores para hacerlo por sí mismos.
- Que usen el hilo dental una vez al día.
- Limita el consumo de azúcares y carbohidratos refinados.
- Tráelos a COI regularmente para que revisemos sus dientes y mantengamos limpia su boca.
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